Jugar como el niño que fui

No he podido evitar sentirme como el niño que fui después de ver la máquina arcade más grande del mundo.

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Es esa sensación extraña. Sólo falta que venga un gigante para poder darnos el cambio y unas cuantas escaleras más para que se acerquen los mirones, parte importante de la experiencia videojueguil de jugar en un salón recreativo.

Vía Arcade Heroes.

4 comentarios en “Jugar como el niño que fui

  1. los mirones, …
    o el otro personaje:
    el enterao.

    x’D coje eso, coje eso…
    pilla vida, pilla vida

  2. los mirones, …
    o el otro personaje:
    el enterao.

    x’D coje eso, coje eso…
    pilla vida, pilla vida

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